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La GRAN MENTIRA del 11S (9/11)

Publicado por mariano68, 12 de Abril de 2015, 12:30:35 AM

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0 Miembros y 4 Visitantes están viendo este tema.

mariano68

Cita de: mariano68 en 04 de Marzo de 2020, 11:25:53 PM
Se suman más y más pruebas que todo lo que nos contó el sistema sobre el 11S, la caída de las torres gemelas o el Pentágono solo es un cuento de hadas.

¿Murió Bin Laden en diciembre de 2001 de una falla renal antes de la invasión estadounidense a Afganistán?       
La relación de conveniencia CIA – Bin Laden se remonta a la resistencia afgana en contra de la ocupación soviética de finales de la década de los años 70.
En su última grabación de video, en 2001, Bin Laden niega cualquier responsabilidad en los ataques a las torres gemelas de Nueva York. El FBI, en 2006, declara en su página web que "no existe evidencia tangible" que conecte a Osama Bin Laden con los hechos del 11 de septiembre de 2001.
El 2 de mayo de 2011, y en menos de 24 horas de haber sido asesinado, el cuerpo de Bin Laden es envuelto en una sábana blanca y echado al mar por una rampa, sin que nadie viera los restos o se tomara foto alguna del cuerpo o el rostro.
Osama Bin Laden habría muerto en diciembre de 2001, debido a una falla renal antes de la invasión estadounidense a Afganistán.
En diciembre de 2001 se publicaron obituarios del funeral de Osama Bin Laden en el periódico egipcio Al Wafd y en el periódico pakistaní The Observer. En enero de 2002, el entonces presidente de Pakistán, Pervez Musharraf, anunció que Bin Laden "estaba probablemente muerto".
En 2008, el exoficial de inteligencia de la CIA Robert Baer, al ser cuestionado sobre Bin Laden dijo: "claro que está muerto". La segunda semana de noviembre de 2014, el exgeneral de Ejército y excomandante de inteligencia paquistaní, Hameed Gul, dijo que Bin Laden había muerto hacía mucho tiempo.
De acuerdo con la  inteligencia israelí, los mensajes, videos y fotografías de Bin Laden post 2001, que aparecieron en momentos políticos estratégicos, eran falsos. En agosto de 2011, a los pocos meses de "haber asesinado a Bin Laden", cerca de 20 comandos de aquella misma unidad mueren al estrellarse el helicóptero que los transportaba en una operación en Afganistán.

Pero hay otra versión del asesinato de Osama Bin Laden. La que nos dio una persona súper confiable porque fue la antigua Primera Ministra de Pakistán Benazir Bhutto, la cual fué asesinada el 27 de diciembre de 2007, al finalizar un mitin en Rawalpindi, a tan solo 12 días antes de las Elecciones de enero de 2008.
El 2 de noviembre de 2007, un mes antes de su asesinato, durante una entrevista televisada con David Frost, Benazir Bhutto declaró que Bin Laden fué asesinado por Omar Sheikh, un agente secreto del ISI, servicio de inteligencia pakistaní, conectado con la CIA y que como líder de los muyahidines talibanes tenía acceso directo a Bin Laden.
En realidad los servicios secretos de los países de la Commonwealth funcionan como meras sucursales de la CIA y del MI6.
El mismo agente secreto, Omar Sheikh, estaba involucrado también en el asesinato de Daniel Pearl, un reportero del Wall Street Journal que había descubierto las relaciones entre el ISI, el Mossad y la CIA en el 11-S, así como que Bin Laden había sido asesinado.
Es llamativo el detalle de que durante la entrevista en televisión, cuando Benazir Bhutto dice que Bin Laden había sido asesinado por el agente Omar Sheikh, el presentador David Frost no se inmuta ni pestañea, ni siente curiosidad por preguntar más acerca de esa afirmación.
Pero lo más elocuente fué que la lider pakistaní fué asesinada al mes siguiente de dicha entrevista.



En el minuto 2:20 se puede ver como Benazir Bhutto confirma que Osama Bin Laden fue asesinado en 2007.

Entonces se deduce fácilmente la falsedad de la actuación del gobierno yanqui en esta foto donde supuestamente "observan" por televisión la operación en donde "mataron" a Bin Laden. Lastima que salvo ellos nadie más en el mundo pudo observar esta grabación televisiva.







Osama Bin Laden is Dead--Thank You Benazir Bhutto
9/11 Was an Inside Job

Opti

Al video titulo $ion lo denuncie en youtube, ya con ese titulo fomenta al "odio racial".
Yo ya no se como bloquearte Mariano te juro que lo intente, o que a tus post entre delirantes y paranoicos no los tenga que leer mas, espero que algún administrador encuentre la forma. Quizás me rajen por que tu locura es superior a la miá de lejos.
Y no es solo una apreciación miá hice leer este y otros hilos a otras personas. todos ellos profesionales y piensan igual que yo.
No se, que se yo...

mariano68

Cita de: Opti en 29 de Octubre de 2020, 01:13:39 PM
Al video titulo $ion lo denuncie en youtube, ya con ese titulo fomenta al "odio racial".
Yo ya no se como bloquearte Mariano te juro que lo intente, o que a tus post entre delirantes y paranoicos no los tenga que leer mas, espero que algún administrador encuentre la forma. Quizás me rajen por que tu locura es superior a la miá de lejos.
Y no es solo una apreciación miá hice leer este y otros hilos a otras personas. todos ellos profesionales y piensan igual que yo.


CitarAl video titulo $ion lo denuncie en youtube, ya con ese titulo fomenta al "odio racial".

Si bien a este video lo retiraron varias veces de You Tube, "curiosamente" desde que está con el título $ion no lo levantaron más. Porque el titulo original no es ese, y en ese video que dice la pura verdad, no fomentan en ningún lugar, ni en ningún momento ningún "odio racial".

CitarYo ya no se como bloquearte Mariano te juro que lo intente, o que a tus post entre delirantes y paranoicos no los tenga que leer mas, espero que algún administrador encuentre la forma. Quizás me rajen por que tu locura es superior a la miá de lejos.
Y no es solo una apreciación miá hice leer este y otros hilos a otras personas. todos ellos profesionales y piensan igual que yo.

Si bien yo no soy profesional en construcciones ni en demoliciones soy ingeniero UTN, y hace un par de meses conocí un ingeniero del ITBA al que le mandé por WhatsApp varios de los posts del foro. El tipo conocía algo de los atentados, la cuestión es que después de mandarle entre videos y posts unos 10 WhatsApp me dijo que no necesito enviarle más material porque se había convencido totalmente que fue un AUTOATENTADO.

Si no quieres leerme simplemente no lo hagas. No necesitas bloquearme ni nada. Yo estoy completamente seguro que lo que postee en este hilo es la pura verdad. Ya discutimos antes, y lo que ahora no puedes rebatir de ninguna manera es que la Primera Ministra de Pakistán Benazir Bhutto declaró el 2 de diciembre de 2007 que Bin Laden fue asesinado por Omar Sheikh, un agente secreto del ISI conectado con la CIA en 2007. A raíz de estas declaraciones Bhutto fue asesinada el 27 de diciembre pocos días después de esta entrevista.

Lo que pasa Opti es que tu tienes lo que los psicólogos denominan "disonancia cognitiva", o sea que la información que te presento contradice tu visión del mundo lo que a su vez te produce una cierta inseguridad.






9/11 Was an Inside Job

Opti

No se, que se yo...

mariano68

El Gran Día de la Mentira: la captura de Bin Laden
Leonid Savin. Analista internacional ruso (Movimiento Euroasático. Moscú)


El 2 de mayo ha pasado a la historia moderna como el día en que fue asesinado el terrorista número uno del mundo, Osama bin Laden. La versión oficial dice que, en 2011, fue asesinado a tiros por las fuerzas especiales de los Estados Unidos en la casa donde vivía con sus esposas e hijos. Aquí la opinión del entonces primer ministro de Pakistán, Imran Khan.

La casa estaba en una ciudad de Pakistán, donde se había estado escondiendo sin ser detectado desde que los miembros principales de al-Qaeda habían huido de Afganistán tras la derrota del gobierno de Mullah Omar , que les había dado refugio. Al amparo de la noche, los helicópteros estadounidenses que transportaban a dos grupos de fuerzas especiales volaron al lugar de la operación desde Afganistán, lo que fue una violación de la soberanía de Pakistán.

Al recordar el incidente en su libro Pakistán: Una historia personal , publicado el mismo año del asesinato oficial de Osama bin Laden, el actual primer ministro de Pakistán, Imran Khan, señaló:

«Era realmente absurdo que el hombre más buscado del mundo no se encontraba en alguna cueva, sino en una ciudad a solo 50 kilómetros de Islamabad y a una milla de la Academia Militar de Pakistán. Lo que lo empeoró fue que el presidente Obama nos dio la noticia a los pakistaníes y al resto del mundo «.

"Pasaron varias horas hasta que nuestro gobierno emitió una declaración en la que felicitaba a los EE. UU. y se atribuía el mérito de haber brindado a los EE. UU. toda la información sobre la ubicación de Osama. Esto provocó la pregunta obvia para todos los pakistaníes: si conocíamos su paradero, ¿por qué no lo capturamos nosotros mismos? Los medios de comunicación en la India y el resto del mundo se volvieron locos, culpando al ISI de Pakistán (en otras palabras, al ejército) por haber mantenido a Osama en una casa de seguridad durante los últimos seis años. [...]

"Tres días después, el jefe del ejército negó todo conocimiento de la operación y anunció que cualquier violación de nuestra soberanía no volvería a ser consentido. Una semana después, el primer ministro se sumó a la confusión cuando finalmente hizo una declaración, sugiriendo «una respuesta coincidente» a cualquier ataque contra «los activos estratégicos de Pakistán».

Para los pakistaníes, especialmente los que viven en el extranjero, este fue uno de los momentos más humillantes y dolorosos. «El jefe de la CIA, Panetta, se frotó la sal en nuestras heridas diciendo sin rodeos que el gobierno de Pakistán era incompetente o cómplice».

Mientras tanto, la maquinaria de propaganda de los Estados Unidos continuaba su trabajo en todo el mundo y pocos ahora discuten la opinión generalizada, o más bien el mito, de que bin Laden fue asesinado en Abbottabad. Se han hecho películas y se han publicado libros que respaldan la versión oficial de Estados Unidos con una narrativa adicional. La página de Wikipedia en ruso sobre la Operación Neptune Spear entra en gran detalle. Además, todos los enlaces son a recursos de los Estados Unidos o reimpresiones de ellos.

Sin embargo, el hecho de que todos los que participaron en la operación en la casa de bin Laden estén muertos parece un poco extraño. Tan sospechoso es el hecho de que el Dr. Shakil Afridi, quien, según la leyenda oficial, obtuvo evidencia del paradero de Bin Laden al administrar un programa de vacunación falso, fue arrestado casi tan pronto como terminó la operación y condenado a 33 años por traición. Otra cosa que hace reflexionar es la historia oficial de que el cuerpo de bin Laden fue enterrado en el mar el mismo día. Aparentemente, hubo suficiente tiempo para el examen y la identificación en la base militar estadounidense en Afganistán y los estadounidenses obtuvieron todo lo que necesitaban saber.

El autor de este artículo recientemente tuvo la oportunidad de ir a Abbottabad y usó la visita para ver dónde fue asesinado Bin Laden y obtener detalles que no se publicaron en la prensa mundial.La ciudad de Abbottabad está situada en un valle rodeado de montañas y cerca de la autopista Karakoram.

Además de la Academia Militar en Abbottabad, hay una serie de bases e instalaciones militares ubicadas alrededor de la ciudad. La cerca de una fábrica de artillería que produce una variedad de armas se extiende por muchos kilómetros a lo largo de ambos lados de la Carretera Karakoram. En otras palabras, es un lugar con un nivel bastante alto de requisitos de seguridad. En 2011, cuando se llevó a cabo la operación, las medidas de seguridad en y alrededor de la ciudad probablemente eran igual de estrictas y serias.

Casi inmediatamente antes de ingresar al terreno de la Academia, hay un solo giro a la derecha que conduce al suburbio de Bilal Town. Nos detuvimos junto a un pequeño grupo de hombres afuera de una tienda y pedimos direcciones a la casa de bin Laden. Después de unos segundos de silencio, uno de ellos nos dijo cómo llegar y adónde acudir. Nos detuvimos nuevamente afuera de otra tienda para aclarar exactamente a dónde íbamos y llegamos unos minutos más tarde.

La primera persona que conocimos fue un señor mayor y le preguntamos acerca de la casa, a lo que él respondió: «Sí, esa es la casa donde los estadounidenses llevaron a cabo su operación y mataron a personas, solo que Bin Laden no estaba allí. Es una mentira

El hombre se apresuró a seguir su camino y no le hicimos más preguntas. Todo lo que queda de la casa son los cimientos (el edificio fue demolido un tiempo después de la operación, otro hecho extraño), y el territorio está rodeado por un muro bastante bajo con algunas aberturas. Vimos a dos hombres dentro de las paredes del complejo y decidimos hablar con ellos. Uno de ellos nos dijo voluntariamente lo que sabía.

Vive cerca y, en la noche en cuestión, él y su familia escucharon el sonido de los helicópteros. El sonido era tan fuerte que su padre se subió al techo, temiendo que un helicóptero cayera sobre su casa. Un destello iluminó el cielo, y estallaron explosiones y disparos.

La casa en sí, donde se llevó a cabo la operación, estaba ubicada lejos de otras estructuras. Hoy en día, hay algunos otros edificios en el vecindario, pero en 2011 solo había un edificio de una planta enfrente. Sin embargo, todos los vecinos subieron a sus techos o afuera para ver qué estaba pasando.

Todos sabían quién vivía en la casa. Según uno de los hombres con los que hablamos, era la familia de un hombre de negocios de Peshawar. Todos los vecinos lo respetaban porque ayudaba regularmente a la comunidad local. La cerca alrededor de su casa era bastante alta y es posible que este fuera el factor decisivo para quienes habían planeado la operación.

«Lo que sucedió después fue como una película de acción india de la década de 1990″, recuerda un testigo ocular. Uno de los helicópteros cayó y estalló en llamas.La policía llegó aproximadamente una hora después de las primeras explosiones y acordonó el área, impidiendo que nadie entrara.»Es extraño, porque cuando hay una boda o una celebración, la gente suele disparar al aire y la policía llega en minutos, pero esta vez les tomó casi una hora», dijo un vecino.

Otro helicóptero llegó poco después, recogió las fuerzas especiales de los Estados Unidos y se fue volando. Mientras nos contaba sobre esto, un hombre joven dijo varias veces que era como un drama bien interpretado, especialmente cuando se toma en cuenta lo que sucedió a continuación.»El anciano caballero que conociste en el camino de regreso fue arrestado por la agencia de inteligencia paquistaní y luego liberado», agregó el vecino.

También cree que Bin Laden no estaba allí, y que fueron personas inocentes las que sufrieron el ataque. Dado que el terreno se compró al estado para desarrollo residencial, es una propiedad legalmente privada. El propietario fallecido probablemente tiene familia en algún lugar, pero nadie lo ha reclamado todavía. Y podría ser que el objetivo se eligiera intencionalmente para que hubiera la menor cantidad de pistas y testigos posibles.

Un destino interesante fue el derrumbe del helicóptero estadounidense que se estrelló. El ejército paquistaní lo entregó a China y, luego de una investigación relevante, el país desarrolló su propia versión del helicóptero estadounidense. Así que la Operación Neptune Spear resultó en una filtración de tecnología militar. Sin embargo, de tales cosas no se habla en Estados Unidos.

Debe agregarse que, durante la guerra de Estados Unidos contra el terrorismo después del 11 de septiembre, 36,000 personas murieron en Pakistán, incluyendo 6,000 soldados; el país ha perdido aproximadamente $ 68 mil millones; y casi medio millón de personas han sido desplazadas. Si mantener a un soldado estadounidense en Pakistán cuesta $ 1 millón por año, el costo de un soldado paquistaní es de $ 900 por año. Y, hasta hace muy poco, los aviones de combate estadounidenses violaron repetidamente el espacio aéreo sobre la frontera de Pakistán con Afganistán, a menudo atacando a civiles en areas tribales en lugar de a terroristas.

Sin embargo, los medios de comunicación que están bajo el control del Departamento de Estado de los EE. UU. continúan informando sobre los éxitos del Ejército de los EE. UU. en su guerra contra el terrorismo. Solo hay que recordar las recientes declaraciones de Donald Trump sobre la victoria de Estados Unidos sobre el ISIS en Siria e Irak. Fabricar mentiras y demonizar a los opositores geopolíticos de Estados Unidos, así como a cualquier persona que no esté de acuerdo con su agenda global está en el trabajo diario para los lacayos de los medios de comunicación de Estados Unidos.

http://www.gracus.com.ar/2019/05/29/el-gran-dia-de-la-mentira-la-captura-de-bin-laden/
9/11 Was an Inside Job

mariano68

115 mentiras sobre los atentados del 11 septiembre
por David Ray Griffin

1. Omisión de la prueba de que por lo menos 6 de los supuestos secuestradores aéreos (entre ellos Waled al-Shehri, acusado por la Comisión de haber apuñaleado a una azafata del vuelo UA11 antes del choque del avión contra la torre norte del World Trade Center) están vivos actualmente (19-20).

2. Omisión de pruebas sobre Mohamed Atta (como su pronunciada inclinación por la bebida, por la carne de puerco y las exhibiciones eróticas privadas o lap dances) que contradicen las afirmaciones de la Comisión de que Atta se había convertido en un fanático religioso (20-21).

3. Confusión voluntariamente creada alrededor de las pruebas que demuestran que Hani Hanjur era tan mal piloto que nunca hubiera sido capaz de lograr estrellar un avión de pasajeros contra el Pentágono (21-22).

4. Omisión del hecho que las listas de pasajeros (flight manifests) que se hicieron públicas no contenían ningún nombre árabe (23).

5. Omisión del hecho que nunca, ni antes ni después del 11 de septiembre, se ha visto que un incendio haya provocado el desplome total de un edificio con estructura de acero (25).

6. Omisión del hecho que los incendios de las Torres Gemelas no fueron ni extremadamente extensos ni especialmente intensos y que ni siquiera duraron mucho tiempo comparados con otros incendios ocurridos en rascacielos (con estructuras) similares sin que estos últimos se desplomaran (25-26).

7. Omisión del hecho que, dada la hipótesis que el incendio provocó los derrumbes, la torre sur, que fue golpeada después que la torre norte y afectada por un incendio de menor intensidad, no debería haber sido la primera en desplomarse (26).

8. Omisión del hecho que el edificio n°7 del World Trade Center (contra el cual no se estrelló ningún avión y que sólo sufrió pequeños incendios muy localizados) también se desplomó, hecho sobre el cual la Agencia Federal para el Manejo de Situaciones de Emergencia (FEMA) confesó que no podía ofrecer ninguna explicación (26).

9. Omisión del hecho que el derrumbe de las Torres Gemelas (y el del edificio n°7) presenta al menos 10 características de haber sido producto de una demolición controlada (26-27).

10. Afirmación según la cual el núcleo de la estructura de cada una de las Torres Gemelas era «un pozo de acero vacío», afirmación que niega la presencia de 47 columnas de acero macizo que eran en realidad el centro de cada torre. Según la teoría del «apilamiento de pisos» (the «pancake theory») que explica los derrumbes, varias decenas de metros de esas columnas de acero macizo debieran haber quedado en pie (27-28).

11. Omisión de la declaración de Larry Silverstein [el propietario del WTC], declaración según la cual el propio Silverstein en coordinación con los bomberos decidió «demoler» –en lenguaje técnico (to «pull»)– el edificio n°7 (28).

12. Omisión del hecho que el acero de los edificios del WTC fue rápidamente recogido del lugar de los hechos y enviado al extranjero por vía marítima ANTES de que pudiera ser analizado en busca de huellas de explosivos (30).

13. Omisión del hecho que el edificio n°7 había sido evacuado antes de su derrumbe, lo implica que la razón que se dio oficialmente para acelerar lo más posible la recogida del acero [en aquel lugar] (porque podía haber sobrevivientes bajo los escombros) no tenía ningún sentido en el caso de este edificio (30).

14. Omisión de la declaración del alcalde R. Giuliani quien dijo que se le advirtió de antemano que el WTC iba a derrumbarse (30-31).

15. Omisión del hecho que Marvin Bush, hermano del presidente estadounidense, y su primo Wirt Walker III eran los directores de la compañía encargada de garantizar la seguridad del WTC (31-32).

16. Omisión del hecho que el ala oeste del Pentágono, [la misma que fue impactada el 11 de septiembre], era precisamente, por diversas razones, la que menos posibilidades tenía de ser blanco de los terroristas de al-Qaeda (33-34).

17. Omisión de toda discusión tendiente a determinar si los daños que sufrió el Pentágono correspondían realmente con los daños que podría haber provocado el impacto de un Boeing 757 desplazándose a varios cientos de kilómetros por hora (34).

18. Omisión del hecho que existen fotos que demuestran que la fachada del ala oeste no se derrumbó hasta 30 minutos después del impacto y que el orificio de entrada es demasiado pequeño para el diámetro de un Boeing 757 (34).

19. Omisión de todo testimonio contradictorio sobre la presencia o la ausencia de pedazos visibles de un Boeing 757, ya sea dentro o fuera del Pentágono (34-36).

20. Ausencia total de discusión tendiente a determinar si el Pentágono disponía de un sistema de defensa antimisiles capaz de derribar un avión de pasajeros, aún cuando la Comisión sugirió que los terroristas de al-Qaeda decidieron no atacar una central nuclear precisamente porque pensaron que esta dispondría de ese tipo de defensa (36).

21. Omisión del hecho que las imágenes provenientes de diferentes cámaras (incluyendo las de la gasolinera que se encuentra frente al Pentágono, confiscadas por el FBI inmediatamente después del impacto) podrían ayudar a determinar qué fue realmente lo que impactó el Pentágono (37-38).

22. Omisión de la alusión del secretario de Defensa D. Rumsfeld a «un misil[ utilizado] para golpear [el Pentágono]» (39).

23. Aprobación aparente de la respuesta, totalmente insatisfactoria, a la pregunta tendiente a saber por qué los agentes del Servicio Secreto permitieron que el presidente Bush permaneciera en la escuela de Sarasota cuando, según la versión oficial, deberían haber pensado que un avión secuestrado podía tener esa misma escuela como blanco (41-44).

24. Fracaso en explicar por qué el Servicio Secreto no pidió una escolta de aviones de caza para [el avión presidencial] Air Force One (43-46).

25. Afirmaciones según las cuales en el momento en que el cortejo presidencial llegó a la escuela [de Sarasota], ninguno de los asistentes sabía que varios aviones habían sido secuestrados (47-48).

26. Omisión del informe según el cual el secretario de Justicia John Ashcroft había recibido una advertencia para que dejara de viajar en líneas aéreas comerciales antes del 11 de septiembre (50).

27. Omisión de la afirmación de David Schippers de que, basándose en informaciones provenientes de agentes del FBI sobre posibles ataques en el sur de Manhattan, él había tratado infructuosamente de transmitir dicha información al secretario de Justicia John Ashcroft durante las 6 semanas anteriores al 11 de septiembre (51).

28. Omisión de toda mención sobre el hecho que agentes del FBI afirmaron tener conocimiento de los blancos y fechas de los ataques [terroristas] mucho antes de los hechos (51-52).

29. Afirmación, mediante una refutación circular que da la cuestión por resuelta, de que el desacostumbrado volumen de compras de acciones en baja antes del 11 de septiembre no implica que los compradores supieran de antemano que los ataques iban a producirse (52-57).

30. Omisión de los informes según los cuales el alcalde [de San Francisco] Willie Brown y ciertos responsables del Pentágono fueron advertidos de que no debían tomar el avión del 11 de septiembre (57).

31. Omisión del informe según el cual Osama ben Laden, que ya en aquel entonces era el criminal más buscado por Estados Unidos, fue atendido en julio de 2001 por un doctor estadounidense en el hospital estadounidense de Dubai y que recibió allí la visita de un agente local de la CIA (59).

32. Omisión de los artículos que sugieren que, después del 11 de septiembre, el ejército estadounidense permitió deliberadamente la fuga de Osama ben Laden (60).

33. Omisión de informes, entre ellos el que reportaba la visita del jefe de los servicios de inteligencia de Arabia Saudita a Osama ben Laden en el hospital de Dubai, que entran en contradicción con la versión oficial de que la familia de Ben Laden y su país han renegado de este (60-61).

34. Omisión del resumen de Gerald Posner sobre el testimonio de Abu Zubaydah, según el cual tres miembros de la familia real saudita (que murieron los tres misteriosamente con sólo 8 días de intervalo) estaban financiando a al-Qaeda y conocían de antemano la realización de los ataques del 11 de septiembre (61-65).

35. Desmentido de la Comisión sobre el descubrimiento de una prueba del financiamiento de los sauditas a al-Qaeda (65-68).

36. Desmentido de la Comisión sobre el descubrimiento de una prueba que demuestra que dinero perteneciente a la esposa del príncipe Bandar, la princesa Haifa, fue entregado a agentes de al-Qaeda (69-70).

37. Desmentido, que simplemente ignoró la diferencia existente entre vuelos privados y vuelos comerciales, sobre el hecho que el vuelo privado en el que varios sauditas viajaron el 13 de septiembre desde Tampa hasta Lexington violó los reglamentos sobre el espacio aéreo establecidos en aquella fecha (71-76).

38. Desmentido sobre la autorización extendida a varios sauditas para que salieran del territorio de Estados Unidos poco después del 11 de septiembre sin que esas personas fuesen sometidas a una investigación apropiada (76-82).

39. Omisión de la prueba que demuestra que el príncipe Bandar obtuvo una autorización especial de la Casa Blanca para los vuelos de los sauditas (82-86).

40. Omisión de la afirmación de Coleen Rowley según la cual responsables del Cuartel General del FBI habían visto el memo de Phoenix del agente Kenneth Williams (89-90).

41. Omisión del hecho que el agente del FBI en Chicago Robert Wright afirma que el Cuartel General del FBI cerró su investigación sobre una célula terrorista y trató posteriormente de intimidarlo para impedir que publicara un libro en el que relata sus experiencias (91).

42. Omisión de la prueba que demuestra que el Cuartel General del FBI saboteó el intento de Coleen Rowley y de otros agentes [del FBI] de Minneapolis de obtener una orden de búsqueda para conseguir la computadora de Zacarias Moussaoui (91-94).

43. Omisión de las tres horas y media de testimonio que prestó ante la Comisión la ex traductora del FBI Sibel Edmonds que, según una carta que ella misma hizo pública y que dirigió al presidente [de la Comisión] Kean, revelaba serias disimulaciones por parte de responsables del FBI en relación con el 11 de septiembre y dentro del propio Cuartel General del FBI (94-101).

44. Omisión del hecho que el general Mahmud Ahmad, jefe del ISI [los Servicios de Inteligencia pakistaníes], se encontraba en Washington una semana antes del 11 de septiembre y que se reunió allí con el director de la CIA, George Tenet, así como con otros altos responsables estadounidenses (103-04).

45. Omisión de la prueba que demuestra que Ahmad, el jefe del ISI [los Servicios de Inteligencia pakistaníes] ordenó el envío de 100 000 dólares a Mohamed Atta antes del 11 de septiembre (104-07).

46. Afirmación de la Comisión de que no encontró prueba alguna de que algún gobierno extranjero, incluyendo al de Pakistán, haya financiado a agentes de al-Qaeda (106).

47. Omisión del informe según el cual la administración Bush presionó a Pakistán para que Ahmad fuese destituido de su cargo de jefe del ISI después de la divulgación de la información que revelaba que este había ordenado el envío de dinero del ISI a Mohamed Atta (107-09).

48. Omisión de la prueba que el ISI (y no sólo al-Qaeda) se encontraba detrás del asesinato de Ahmad Shah Massud (el comandante de la Alianza del Norte en Afganistán) que se produjo precisamente después de un encuentro que duró una semana entre responsables de la CIA y del ISI (110-112).

49. Omisión de la prueba que demuestra que el ISI está implicado en el secuestro y posterior asesinato de Daniel Pearl, periodista del Wall Street Journal (113).

50. Omisión del informe de Gerald Posner según el cual Abu Zubaydah afirmó que un oficial militar pakistaní, Mushaf Ali Mir, que mantenía estrechos vínculos con el ISI y con al-Qaeda sabía de antemano de los ataques del 11 de septiembre (114).

51. Omisión de la predicción que hizo, en 1999, Rajaa Gulum Abbas, agente del ISI, de que las Torres Gemelas «se derrumbarían» (114).

52. Omisión del hecho que el presidente Bush y otros miembros de su administración se refirieron repetidamente a los ataques del 11 de septiembre como «oportunidades» (116-17).

53. Omisión del hecho que el Proyecto para el Nuevo Siglo Americano («The Project for the New American Century»), muchos de cuyos miembros se convirtieron en figuras claves de la administración Bush, publicó en el año 2000 un documento que decía que un «nuevo Pearl Harbour» ayudaría a conseguir fondos para una rápida transformación tecnológica del aparato militar estadounidense (117-18).

54. Omisión del hecho que Donald Rumsfeld, quien fue presidente de la comisión del US Space Command y había recomendado aumentar el presupuesto destinado a este, se valió de los ataques del 11 de septiembre, en la tarde de ese mismo día, para garantizar esos fondos (119-22).

55. No se mencionó que las tres personas responsables del fracaso de los esfuerzos por prevenir los ataques del 11 de septiembre (el secretario de Defensa Donald Rumsfeld, el general Richard Myers y el general Ralph Eberhart) eran también los tres principales promotores del US Space Command (122).

56. Omisión del hecho que Unocal había declarado que los talibanes no podían garantizar la seguridad adecuada para emprender la construcción de sus pipelines (para petróleo y gas) a partir de la cuenca del Caspio y a través de Afganistán y Pakistán (122-25).

57. Omisión del informe según el cual representantes de Estados Unidos dijeron durante un encuentro, en julio de 2001, que ya que los talibanes rechazaban su proposición de construir un oleoducto, una guerra contra ellos comenzaría en octubre (125-26).

58. Omisión del hecho que en su libro, publicado en 1997, Zbigniew Brzezinski escribía ya que para que Estados Unidos pueda mantener su predominio global es necesario que ese país controle el Asia central, con sus vastos recursos petrolíferos, y que un nuevo Pearl Harbour sería útil para obtener el apoyo de la opinión pública estadounidense a esos designios imperiales (127-28).

59. Omisión del hecho que miembros claves de la administración Bush, entre ellos Donald Rumsfeld y su delegado Paul Wolfowitz, se esforzaron durante muchos años por desatar una nueva guerra contra Irak (129-33).

60. Omisión de los apuntes de las conversaciones de Donald Rumsfeld correspondientes al 11 de septiembre que demuestran que este estaba decidido a utilizar los ataques como pretexto para desatar una guerra contra Irak (131-32).

61. Omisión de la declaración que aparece en el Proyecto para un Nuevo Siglo Americano, según la cual «la necesidad de una fuerte presencia estadounidense en el Golfo va más allá del tema del régimen de Sadam Husein» (133-34).
9/11 Was an Inside Job

mariano68

62. Afirmación según la cual el protocolo de la FAA (Federal Aviation Agency) sobre lo sucedido el 11 de septiembre requería un largo proceso de aplicación que tenía que pasar por varias etapas de la cadena de mando cuando el propio Informe Oficial [de la Comisión] cita pruebas de lo contrario (158).

63. Afirmación según la cual en aquellos días sólo dos bases de la fuerza aérea estadounidense del sector noreste del NORAD (North American Aerospace Defense Command o Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte) mantenían cazas en alerta y, en particular, que no había aviones de combate en alerta en las bases de McGuire y de Andrews (159-162).

64. Omisión del hecho que la base Andrews de la fuerza aérea estadounidense tenía varios aviones de caza en alerta permanente (162-64).

65. Aceptación de la doble afirmación según la cual el coronel Marr, del NEADS (North East Air Defense Sector), tenía que comunicarse telefónicamente con un superior para que este lo autorizara a enviar aviones de caza desde [la base] de Otis y que necesitó 8 minutos para realizar esa llamada (165-66).

66. Aprobación de la afirmación según la cual la pérdida de la señal del transpondedor de un avión hace prácticamente imposible la localización de la nave por los radares militares estadounidenses (166-67).

67. Afirmación según la cual la intercepción de Stewart Payne no demostró que el tiempo de respuesta del NORAD en el caso del vuelo AA11 fue extraordinariamente lento (167-69).

68. Afirmación según la cual los cazas de la base de Otis se mantuvieron en tierra durante 7 minutos después de haber recibido la orden de despegue porque no sabían adónde volar (174-75).

69. Afirmación según la cual las fuerzas armadas estadounidenses no sabían del desvío del vuelo UA175 hasta las 9h30, momento exacto en que este vuelo se estrelló contra la torre sur del WTC (181-82).

70. Omisión de toda explicación sobre (a) la razón por la cual un informe anterior del NORAD, según el cual la FAA notificó a los militares el desvío del vuelo UA175 a las 8h43, se considera ahora como falso y (b) cómo fue que ese informe, si era falso, pudo ser publicado y se mantuvo como válido durante cerca de 3 años (182).

71. Afirmación según la cual la FAA no estableció la teleconferencia sino a partir de las 9h20 de aquella mañana (183).

72. Omisión del hecho que un memo de Laura Brown, de la FAA, afirma que la teleconferencia se estableció sobre las 8h50 y que trató precisamente sobre el desvío del vuelo UA175 (183-84, 186).

73. Afirmación según la cual la teleconferencia del NMCC, (Centro de Mando Militar o National Military Command Center) no comenzó antes de las 9h29 (186-88).

74. Omisión, en la afirmación de la Comisión de que el vuelo AA77 no se desvió de su trayectoria antes de las 8h45, del hecho que la hora mencionada en informes anteriores fue las 8h46 (189-90).

75. Fracaso en mencionar que el anuncio de la caída de un jet en Kentucky, poco después del momento en que el vuelo AA77 desapareciera del radar de la FAA, fue tomada lo bastante en serio por los responsables de la FAA y de la unidad antiterrorista del FBI como para que estos la enviaran a la Casa Blanca (190).

76. Afirmación según la cual el vuelo AA77 voló durante cerca de 40 minutos por el espacio aéreo estadounidense en dirección a Washington sin ser detectado por los radares militares (191-92).

77. Fracaso en explicar, si el anterior informe del NORAD según el cual se le informó a este –a las 9h24– que la trayectoria del vuelo AA77 era «incorrecta», cómo fue que ese informe erróneo pudo salir a la luz, o sea que se trata de saber si los responsables del NORAD mintieron o si fueron «embaucados» durante cerca de tres años (192-93).

78. Afirmación según la cual los aviones de combate de Langley, que según dijera primeramente el NORAD fueron enviados a interceptar el vuelo AA77, fueron realmente desplegados como respuesta a un informe erróneo de un controlador (no identificado) de la FAA de las 9h21 de que el vuelo AA11 se encontraba aún en vuelo y que se dirigía hacia Washington (193-99).

79. Afirmación según la cual los militares no fueron contactados por la FAA sobre el probable secuestro del vuelo AA77 antes del impacto contra al Pentágono (204-12).

80. Afirmación de que Jane Garvey no se sumó a la videoconferencia de Richard Clarke hasta las 9h40, o sea después del impacto contra el Pentágono (210).

81. Afirmación de que ninguna de las teleconferencias logró coordinar la FAA y las respuestas de los militares a los secuestros porque «ninguna [de las mismas] incluía a los responsables adecuados en el seno de la FAA y del Departamento de Defensa », aunque Richard Clarke dice que su propia videoconferencia incluía a la directora de la FAA Jane Garvey, al secretario de Defensa Donald Rumsfeld y al general Richards Myers, jefe interino de las Fuerzas Armadas (211).

82. Afirmación de la Comisión según la cual esta no sabía qué miembros del Departamento de Defensa participaron en la videoconferencia con Richard Clarke cuando el propio Clarke afirma en su libro que se trataba de Donald Rumsfeld y del general Myers (211-212).

83. Aprobación de la afirmación del general Myers de que él se encontraba en el Capitolio durante los ataques sin mencionar el informe contradictorio de Richard Clarke, según el cual Myers estaba en el Pentágono y participó en la videoconferencia con Clarke (213-17).

84. Fracaso al mencionar la contradicción entre el testimonio de Clarke sobre los movimientos de Rumsfeld de aquella mañana y las declaraciones del propio Rumsfeld (217-19).

85. Omisión del testimonio del secretario de Transporte Norman Mineta ante la propia Comisión, testimonio según el cual el vicepresidente Cheney y las demás [personas presentes] en el refugio subterráneo habían sido advertidas a las 9h26 de que un avión se acercaba al Pentágono (220).

86. Afirmación según la cual los responsables del Pentágono no sabían que un avión se estuviera acercando a ellos antes de las 9h32, las 9h34 o las 9h36, o sea sólo minutos antes que el edificio fuera impactado (223).

87. Aceptación de dos versiones que se contradicen entre sí sobre el aparato que impactó el Pentágono: una que describe la ejecución de una espiral de 330 grados hacia abajo (un «picado a gran velocidad») y otra en la que no se menciona esa maniobra (222-23).

88. Afirmación según la cual los cazas provenientes de Langley, que supuestamente recibieron la orden de despegar rápidamente para proteger Washington del «vuelo fantasma AA11» no estaban en lo absoluto cerca de Washington porque fueron enviados hacia el océano por error (223-24).

89. Omisión de todas las pruebas que sugieren que lo que impactó el Pentágono no fue el vuelo AA77 (224-25).

90. Afirmación según la cual la FAA no informó a los militares sobre el desvío del vuelo UA93 antes de que este se estrellara (227-29, 232, 253).

91. Doble afirmación de que el NMCC no monitoreó la conferencia iniciada por la FAA y no pudo por consiguiente conectar a la FAA con la teleconferencia iniciada por el NMCC (230-31).

92. Omisión del hecho que el Servicio Secreto dispone de medios que le permiten tener conocimiento de todo lo que hace la FAA (233).

93. Omisión de toda investigación sobre las razones que llevaron al NMCC a comenzar su propia teleconferencia si, como dijo Laura Brown –de la FAA–, eso no forma parte del protocolo standard (234).

94. Omisión de toda investigación sobre por qué el general Montague Winfield no solamente fue reemplazado por un «bisoño» (a rookie), el capitán Leidig, como director de operaciones del NMCC sino que abandonó además el mando cuando estaba claro que el Pentágono se encontraba ante una crisis sin precedente (235-36).

95. Afirmación según la cual la FAA notificó (de forma errónea) al Servicio Secreto, entre las 10h10 y las 10h15, que el vuelo UA93 se encontraba todavía en vuelo y se dirigía hacia Washington (237).

96. Afirmación según la cual el vicepresidente Cheney no dio la autorización para disparar hasta las 10h10 (varios minutos después de la caída del vuelo UA93) y que esa autorización no fue transmitida a la fuerza aérea hasta las 10h31 (237-41).

97. Omisión de todas las pruebas que indican que el vuelo UA93 fue derribado por un avión militar (238-39, 252-53).

98. Afirmación según la cual [el zar del contraterrorismo] Richard Clarke no recibió el pedido de autorización de fuego hasta las 10h25 (240).

99. Omisión del testimonio del propio Clarke, que sugiere que este recibió el pedido de autorización de fuego hacia las 9h50 (240).

100. Afirmación según la cual Cheney no bajó al refugio subterráneo del PEOC [o CPOU (siglas correspondientes a Centro Presidencial de Operaciones de Urgencia]) hasta las 9h58 (241-44).

101. Omisión de los múltiples testimonios, entre ellos los de Norman Mineta [secretario de Transporte] ante la propia Comisión, testimonios según los cuales el [vicepresidente] Cheney se encontraba en el CPOU antes de las 9h20 (241-44).

102. Afirmación según la cual la autorización para derribar un avión civil tenía que ser otorgada por el presidente (245).

103. Omisión de informes según los cuales el coronel Marr ordenó derribar el vuelo UA93 y el general Winfield indicó que él mismo y otros [oficiales] esperaban en el NMCC que un caza alcanzara el vuelo UA93 (252).

104. Omisión de informes que indican que había dos aviones de caza en el aire a varios kilómetros de New York y tres a sólo 320 kilómetros de Washington (251).

105. Omisión del hecho que había por lo menos 6 bases militares con cazas en estado de alerta en la región noreste de Estados Unidos (257-58).

106. Aprobación de la afirmación del general Myers de que el NORAD había definido su misión solamente en términos de defensa contra amenazas dirigidas [hacia Estados Unidos] desde el extranjero (258-62).

107. Aprobación de la afirmación del general Myers de que el NORAD no había previsto la posibilidad de que un grupo de terroristas pudiera utilizar aviones de pasajeros secuestrados como misiles (262-63).

108. Fracaso en poner en perspectiva la significación del hecho, presentado en el propio Informe, o en mencionar otros hechos que prueban que el NORAD sí había efectivamente previsto la amenaza que podía representar la posible utilización de aviones de pasajeros secuestrados como misiles (264-67).

109. Fracaso en explorar la implicaciones de la cuestión de saber cómo pudieron influir la maniobras militares («war games») programadas para aquel día en el fracaso de los militares en los intentos por interceptar los aviones de pasajeros secuestrados (268-69).

110. Fracaso en discutir la posibilidad que el desarrollo de la Operación Northwoods haya favorecido los ataques del 11 de septiembre (269-71).

111. Afirmación (presentada para explicar por qué los militares no recibieron la información sobre los aviones secuestrados con tiempo suficiente para lograr interceptarlos) según la cual el personal de la FAA falló inexplicablemente unas 16 veces en la aplicación de los procedimientos normales (155-56, 157, 179, 180, 181, 190, 191, 193, 194, 200, 202-03, 227, 237, 272-75).

112. Fracaso en mencionar que la proclamada independencia de la Comisión se vio fatalmente comprometida por el hecho que su director ejecutivo, Philip Zelikow, era prácticamente miembro de la administración Bush (7-9, 11-12, 282-84). (ndt: era colaborador cercano de Condoleeza Rice)

113. Fracaso en mencionar que la Casa Blanca trató primeramente de impedir la creación de la Comisión [Oficial de Investigación sobre los Ataques Terroristas del 11 de Septiembre] y que obstaculizó después el trabajo de esta, como lo hizo al asignarle un presupuesto extremadamente restringido (283-85). (ndt: Presupuesto estimado en 15 millones de dólares cuando el film de ficción «Vuelo 93» de Paul Greengrass costó 18 millones y «World Trade Centre» de Oliver Stone costó CUATRO VECES MÁS, o sea 60 millones de dólares. En lo tocante al primer punto, la creación de la Comisión no se produjo hasta después de 441 días de los ataques y el presidente Bush propuso que fuera presidida por Henry Kissinger... para luego retractarse ante las violentas críticas de la opinión pública contra esa proposición.)

114. Fracaso en mencionar que el presidente de la Comisión, la mayoría de los demás miembros de la Comisión, y por lo menos la mitad del personal de la misma tenía serios conflictos de intereses (285-90, 292-95).

115. Fracaso de la Comisión, la cual se vanagloriaba de que la presentación de su informe final había tenido lugar «sin disensión», en mencionar que esto fue posible únicamente porque Max Cleland, el miembro de la Comisión más crítico en cuanto a la actuación de la Casa Blanca –juró incluso «que no sería cómplice de un tratamiento parcializado de las informaciones»–, tuvo que renunciar a su puesto dentro de la Comisión para poder aceptar un cargo en el Banco Export-Import y que la Casa Blanca dio a conocer su nominación para ese cargo únicamente después que las críticas emitidas por Cleland se hicieron especialmente directas (290-291).

Terminaré precisando que concluí mi estudio del texto que he dado en llamar «el informe Kean-Zelikow» escribiendo lo siguiente: Finalmente, el Informe de la Comisión Investigadora sobre el 11 de septiembre, lejos de evacuar mis dudas en cuanto a una complicidad oficial, no hizo más que confirmarlas. ¿Qué podría llevar a los responsables encargados de la redacción de ese informe final a montar una superchería de tanta envergadura si no el intento de enmascarar enormes crímenes? (291)

David Ray Griffin

https://www.voltairenet.org/article143924.html
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"El 11-S fue un ataque de falsa bandera para que EEUU ejecutara sus planes en Oriente Medio"

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ROMERO en "Criterio Periodístico" con Vero Ressia - 12/8/21
Biden está siendo presionado para desclasificar todos los archivos que revelarían la verdad de la conspiración 9/11.

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Opti

Opinión personal: No se vana a pelear con su aliado y proveedor de petroleo Arabia Saudita, piensan así  "murió gente lo lamentamos, matamos gente en Afganistán en nombre de la libertad y coso... y la vida continua" el americano es una persona con escasa cultura que "paga sus impuestos" y que te esta orgulloso que su comida sea barata (Y es verdad) No les importa saber que paso realmente, no son los jóvenes de la era de  Vietnam
No se, que se yo...

mariano68

Cita de: Opti en 16 de Agosto de 2021, 04:37:31 PM
Opinión personal: No se vana a pelear con su aliado y proveedor de petroleo Arabia Saudita, piensan así  "murió gente lo lamentamos, matamos gente en Afganistán en nombre de la libertad y coso... y la vida continua" el americano es una persona con escasa cultura que "paga sus impuestos" y que te esta orgulloso que su comida sea barata (Y es verdad) No les importa saber que paso realmente, no son los jóvenes de la era de  Vietnam

Que se yo. Tampoco nadie pensaba que se iban a ir de Afganistán en forma tan vergonzosa. Perdieron Vietnam, perdieron Afganistán pero el complejo industrial militar vendió sus armas e hizo su negocio.
Si. El yanqui es de escasa cultura, algo parecido al argentino, a algunos no les interesará lo que pasó pero a otros si.



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mariano68

#431
SEVEN Official Trailer | A Dylan Avery Film on Building 7



SEVEN, AE911Truth's new feature documentary about Building 7 and the intrepid study by Dr. Leroy Hulsey at the University of Alaska Fairbanks.

Mientras visitaba Fairbanks en agosto de 2018, tuve la suerte de conocer al ingeniero principal del equipo, el profesor Leroy Hulsey. En ese momento, el equipo estaba a punto de terminar su trabajo. Mientras charlábamos mientras tomábamos un café, el Dr. Hulsey me explicó que sus ingenieros habían descartado el fuego como causa del colapso del WTC-7 al principio de su investigación. El NIST había argumentado en su informe que los incendios del edificio en las plantas inferiores debilitaron una columna crítica (la 79) en la parte noreste del edificio, provocando su fallo. Esto supuestamente causó que dos columnas cercanas (#80 y #81) fallaran, poniendo en marcha un "colapso progresivo".

Sin embargo, el equipo de Hulsey descubrió que el NIST tergiversó detalles estructurales clave del WTC-7, invalidando su modelo de colapso inducido por el fuego.

Le pregunté al Dr. Hulsey si tenía acceso a los planos originales. Respondió que su equipo tenía algo mejor, a saber, los registros y diagramas de construcción reales. Estos cuentan la historia completa porque los contratistas no siempre siguen exactamente los planos durante la construcción. Las modificaciones son habituales.

Cuando el equipo de Hulsey incorporó los detalles estructurales reales del WTC-7 en un modelo informático y realizó simulaciones del escenario de colapso del NIST, el edificio no se derrumbó. La torre soportó la pérdida de tres columnas principales gracias a la resistencia redundante de la estructura de acero. Las cargas se transfirieron simplemente a otras columnas.

Sus ingenieros realizaron entonces más simulaciones, restando cada vez una columna más hasta inducir un colapso. Sin embargo, en lugar de derrumbarse como se observó el 11-S, el edificio se inclinó hacia el sureste. Numerosos vídeos tomados desde distintos ángulos muestran que la torre de estructura de acero de 47 pisos cayó directamente sobre su huella.

Después de repetidas pruebas, el equipo de Hulsey concluyó que el escenario de colapso progresivo del NIST no era factible. En ese momento, comenzaron a explorar otros escenarios de colapso en un intento de duplicar el evento real capturado en la película. Sólo había una coincidencia: el fallo simultáneo de todas las columnas del núcleo, seguido 1,3 segundos después por el fallo simultáneo de todas las columnas del perímetro. El patrón debería ser reconocible porque es la secuencia estándar empleada en las demoliciones controladas.

Caída libre

El excelente trabajo realizado por el equipo de Hulsey refuerza los argumentos a favor de los explosivos, que ya eran convincentes en 2008. En agosto de ese año, se permitió al público comentar el borrador del informe del NIST sobre el WTC-7 en una audiencia abierta. Un profesor de física llamado David Chandler aprovechó la ocasión para hacer preguntas que resultaron tan embarazosas que el NIST se vio obligado a modificar el lenguaje de su informe final, publicado poco después. En él, el NIST admite que el WTC-7 cayó con una aceleración de caída libre. Fue una admisión condenatoria porque la agencia había reconocido previamente que la caída libre es la firma de una demolición controlada.

Como sabemos, el Edificio Siete albergaba a la CIA, al Departamento de Defensa, a los principales operadores de valores y a las oficinas de la Comisión de Valores y Bolsa (SEC), donde se almacenaban los registros de muchas investigaciones en curso de la SEC sobre delitos corporativos, incluyendo a Enron. Todos estos registros fueron destruidos el 11 de septiembre. Posteriormente, la SEC archivó todas estas investigaciones penales, lo que resultó muy conveniente (y rentable) para las empresas estadounidenses.

El NIST afirma que nunca encontró pruebas de explosivos en el World Trade Center (WTC). La razón, por supuesto, es que la agencia nunca buscó, a pesar de que este es un protocolo estándar después de los incendios de grandes edificios, por no hablar del peor ataque terrorista en la historia de Estados Unidos.

Los científicos independientes sí miraron. En 2007, un físico de la Universidad Brigham Young, el Dr. Steven Jones, informó del descubrimiento de diminutas escamas de thermate sin explotar en muestras de polvo del WTC recogidas inmediatamente después del 11-S.

El thermate se diferencia de su primo el thermite en que contiene azufre elemental, que tiene el efecto de reducir en gran medida el punto de fusión del hierro. La termita se compone de óxido de hierro y aluminio y se utiliza ocasionalmente en trabajos de demolición. A veces se añade azufre para acelerar la reacción. Jones también encontró una gran cantidad de pequeñas microesferas ricas en hierro en el polvo, una prueba contundente de que el acero se había fundido. Otros investigadores también informaron del hallazgo de microesferas.

El anunciado descubrimiento de thermate en el polvo del WTC debería haber sido noticia en todo el país. Sin embargo, no se mencionó en el New York Times ni en el Washington Post. Y el resto de los medios de comunicación estadounidenses siguieron su silenciosa "pista".

Jones siguió estudiando el polvo del WTC y más tarde fue coautor de un artículo más detallado con Niels Harrit, un químico danés, y otros científicos. Su artículo, revisado por expertos, apareció en una revista científica online en 2009. A día de hoy, nunca ha sido refutado.

Los autores identificaron los componentes de los diminutos copos y descubrieron que eran de naturaleza termítica. Los granos de óxido de hierro eran extremadamente pequeños, de unos 100 nanómetros de diámetro, lo que indica el uso de la forma más explosiva de termita conocida como nanotermita o supertermita. Cuando los autores encendieron los copos, comprobaron que eran más energéticos que los explosivos convencionales. Estas reacciones también produjeron microesferas ricas en hierro como las encontradas en el polvo del WTC.

La nanotermita fue desarrollada por el Laboratorio Nacional Lawrence Livermore y estuvo disponible en abril de 2000, diecisiete meses antes del 11-S.

Pero la nanotermita y el thermate no fueron probablemente los únicos explosivos utilizados para derribar las torres. Las columnas de caja que sostenían el World Trade Center Uno y Dos tenían un grosor de siete pulgadas en la base (según informó el NIST). Y muchas de estas enormes columnas del núcleo habían sido cortadas a nivel del suelo o cerca de él. En los años posteriores al 11-S, se produjo un debate dentro de la comunidad de la verdad del 11-S sobre qué tipo de explosivos adicionales se habían utilizado. Muchos creían que la termita/termita no podría haber hecho el trabajo de forma fiable en las gigantescas columnas.

Las potentes explosiones que destruyeron las columnas del núcleo justo antes de que cayeran cada una de las torres sacudieron Manhattan. Las explosiones causaron una nube de polvo que se elevó desde el nivel de la calle; esto fue capturado en la película. Y el estupendo ruido de las explosiones fue escuchado y sentido por muchos miles de neoyorquinos (y grabado) al menos hasta Hoboken, en la orilla oeste del río Hudson. Sin embargo, todos los relatos de los testigos oculares fueron desestimados como desvaríos de chiflados conspiradores.

Estas tremendas explosiones sin duda también ayudan a explicar las grandes cantidades de acero fundido encontradas bajo las ruinas del WTC. El calor debió de ser increíble, porque, en los días posteriores a los atentados, los bomberos de Nueva York bombearon millones de galones de agua sobre los montones humeantes, sin ningún efecto. Los perros traídos por los socorristas para ayudar a localizar a los supervivientes entre los restos sufrieron graves quemaduras, y algunos de ellos murieron. Los trabajadores del lugar dijeron que sus botas de goma se derritieron. Los equipos de limpieza seguían informando de la existencia de acero fundido en febrero de 2002.

Los incendios de edificios y la quema de combustible para aviones no pueden explicar las microesferas de hierro y el acero fundido. Ni de lejos.

Un estudio sobre la calidad del aire aportó pruebas adicionales. Después de los atentados, un físico de la Universidad de California (Davis), el Dr. Thomas Cahill, llevó un equipo a Nueva York e instaló estaciones de control del aire en el bajo Manhattan. El equipo de Cahill documentó el aire más tóxico que había visto en el transcurso de su larga carrera. En su informe, Cahill menciona una anomalía que no pudo explicar: la abundancia de partículas de tamaño nanométrico que salían de las ruinas del WTC. Los incendios ordinarios de edificios no producen grandes cantidades de nanopartículas, que son una prueba de las temperaturas extremas.

Después de analizar los datos, Cahill emitió una advertencia de salud extrema. Las nano partículas de vidrio, productos químicos y metales pesados se infiltran fácilmente en el cuerpo humano. Dañan el corazón y otros órganos, e incluso atraviesan la barrera hematoencefálica. Cahill predijo una crisis sanitaria continua para los residentes locales y para los trabajadores de limpieza, muchos de los cuales no llevaban máscaras protectoras porque se les dijo que el aire era seguro para respirar. En los años siguientes, miles de socorristas, bomberos y trabajadores de la construcción sufrieron leucemias y otros cánceres que pusieron en peligro su vida, así como enfermedades isquémicas del corazón y los pulmones. Muchos más estadounidenses murieron a causa de los gases tóxicos que los que perecieron en los atentados.

Aunque las pruebas que he resumido son legalmente concluyentes, estoy en contacto con un físico que ha ido aún más lejos. Ha tratado de conseguir que científicos especializados en materiales realicen estudios radioisotópicos de muestras de acero del WTC. Desgraciadamente, hasta ahora ninguno de los laboratorios de Europa o Japón ha aceptado realizar las pruebas definitivas, probablemente porque fueron advertidos por las autoridades estadounidenses.

Estén atentos. Los abogados del 11-S tienen la intención de llevar este caso histórico hasta el Tribunal Supremo, si es necesario. En los próximos días, los estadounidenses sabrán si el sistema judicial estadounidense es capaz de hacer justicia a las familias de las víctimas. Sólo la verdad sobre los atentados del 11-S puede curar a nuestra nación.


https://tierrapura.org/2021/09/03/veinte-anos-despues-los-abogados-del-11-s-presionan-para-que-se-revele-todo-en-los-tribunales/
9/11 Was an Inside Job